Una habitación oscura, un salvador y un número de lotería

 Aunque lo pueda parecer, no se trata de un capítulo de sitcom. Fue un sueño "muy real", una salida extracorpórea para ser exactos, con un final inusual. 

Aquella noche de invierno, daba vueltas sin parar sobre la cama; frio, sudor, vuelta a un lado, vuelta al otro. Parecía estar haciendo un combate de sumo con el edredón. Las dos de la madrugada, las tres... Prometía, la noche se estaba poniendo interesante, por qué entre la discusión que mantenía viva entre sabanas, almohadas y edredones, iba y venia al mundo de Morfeo, y la experiencia tomaba forma.  

Y sucedió, llego la salida del cuerpo. La situación se torno tranquila y apacible, ya no había discusiones. Me encontraba tumbado en mi cama, mirando hacia el techo. En esos momentos pude navegar por la habitación a mi antojo, como si de un ave se tratara. Un vistazo hacia arriba, otro al suelo, y así recorriendo aquella habitación en penumbra. No tardó mucho tiempo en cambiar la situación a otra no tanto agradable.Me encontré de pronto paralizado y sin poder mover ni un solo musculo. 

"Luz ¿Puede alguien dar luz a esta habitación?" Pensé. Pedí ayuda. Pasaron un instantes y apareció bajo mis pies un hombre de unos cincuenta años. Aquel individuo estaba ahí para ayudarme. En su cuerpo se podía observar retazos de luz verde. Como si en su interior fuera una luz de ese color y el cuerpo tan solo una carcasa a punto de romperse. Acomodó sus manos en mis pies y esa luz, como si de un ser inteligente se tratase, invadió parte de mi cuerpo. Ahora sí, pude ver la habitación con más claridad y aquel hombre desapareció al instante. 

"¿Que hago ahora? ¿Por qué estoy aquí?" "Lotería" Pensé. Unas semanas atrás, estuve pensando en la lotería del cupón de la ONCE para el día once de noviembre. Es un cupón especial que se realiza todos los años y yo, que creo en la posibilidad de sacar un número de lotería a través de los sueños, lo primero que pensé ante esa situación es pedir un número ¿Por qué no? ya ha sucedido otras veces. 

"¿Me puedes dar un número de lotería para el día 11 de noviembre del 2023 del cupón de la ONCE?" Pregunte al hombre, ya desaparecido. Más explicito no pude ser. Silencio, nada. "¿Le habrá sentado mal?" "Bueno, en otra ocasión será". 

Y de pronto, todo cambió. Pasé a ser un espectador de una curiosa escena. En ella pude ver a dos mujeres, una de ellas la madre de un pequeño niño que señalaba un kiosko dónde se vendían cupones de la ONCE. Era un momento apacible y soleado. Las dos amigas hablaban animadas y el pequeño decía "57188". Pude escuchar claramente el número 88. 

Al despertar de esa experiencia pensé en todo lo que había vivido aquella noche. Sé que hay personas que han obtenidos premios importantes en loterías a través de los sueños. ¿Y si era el caso? De hecho el libro "El poder de la visualización en los números", trata de ello. Veremos en unos días si el destino a querido ser tan generoso de compartir en un sueño, un premio de lotería. Yo lo comparto, y si vosotros, queridos lectores, accedéis a un premio de lotería de esta manera, habrá que celebrarlo.

Un fuerte abrazo.