Joan Miró; el sueño.

 

 Siempre digo que cuando se sueña algo significativo, hay que estar atentos. Y vaya, este sueño si que ha sido algo más que eso. Hubo un momento clave dentro del sueño que me llamó especialmente la atención, aunque si he de ser sincero, es más llamativo una vez despierto y desmigo la salida al plano onírico. 

Me gusta el arte, en general. Hay pintores y artistas muy destacados que he ido descubriendo con el paso de los años; Picasso, Dalí, Gaudí, etc. Pero Miró nunca se había cruzado en mi camino; hasta ahora. Pues me encontré con un hombre mayor de unos setenta años de edad. Estaba frente a un enorme cuadro de unos dos metros de largo por uno y medio de alto aproximadamente. En cuanto le vi, supe que era Miró. Jamás le había visto, pero en los sueños no se sabe muy bien el porqué conoces ciertas cosas que aquí no. La cuestión es que él estaba dando su última pincelada a un cuadro que no encajaba con su habitual diseño de pinturas. El lienzo era de color marrón, no es que el le diera color, es qué ese era su color. Y tan solo pintó con un color; marron rojizo. Se trabata tan solo de unas lineas y ni siquiera estaba sombreadan. Esas lineas definian perfectamente un pequeño pueblo. Detrás de este se podía observar unas montañas. Ya está, tan simple y sencillo como eso. Sé que era un lugar muy importante para él. Parecía rememorar ese paisaje tan importante para él. De pronto, el hombre afable, señaló en la esquina izquierda del cuadro con su pincel  algo escrito; una fecha. Podía vislumbrar un tanto borroso unas letras, quizás su firma, y una fecha. Un año es lo que pude percibir ¿Pero cuál era y por qué me lo mostró? Sin más, finalizó mi experiencia con Joan Miró. 

He estado investigando y me he llevado sorpresas muy agradables. Miró nació en el año 1893 y falleció en 1983. Curioso juego de números. Diría que es clave su fecha de fallecimiento, por qué es un año que percibo desde hace alguna década. Y sí, querído lector, he descubierto el origen del cuadro; Mont-roig del Camp. Es un pequeño pueblo en la costa de Tarragona en el qué a partir de 1911 el artista se inspiraba entre sus tierras. El dibujo que pude observar es la parte opuesta a la playa; en las montañas. La respuesta a tu pregunta amigo mío no la sé, desconozco la razón por la cuál un artista se presentó ante mí con un estupendo y enorme cuadro. Pero he de darle las gracias por descubrirlo y observar con más detalle aquellos garabatos que mi tosca mente veía cada vez que observaba algo de él. Ahora sé que va más allá de unos simples garabatos. 

Gracias Miró